¿Cómo curar la osteocondrosis de la columna torácica?

Osteocondrosis de la columna torácica

La osteocondrosis es una enfermedad de la columna vertebral, caracterizada por el desarrollo de cambios degenerativos-distróficos en el tejido óseo y cartilaginoso en uno o más de sus departamentos. El desarrollo de osteocondrosis torácica es mucho menos común que manifestaciones similares en la columna cervical y lumbar. Esto se debe a las peculiaridades de la estructura anatómica de la parte media de la espalda humana, donde la movilidad de las vértebras es algo limitada. Esto reduce significativamente la probabilidad de lesiones. Hace un par de décadas, este tipo de osteocondrosis era más común en personas mayores. Hoy en día, la enfermedad también afecta a hombres y mujeres más jóvenes. Los niños no son una excepción.

Descripción

La osteocondrosis de la columna torácica es una enfermedad del sistema esquelético, caracterizada por daños en los discos intervertebrales, las vértebras y sus cambios degenerativos. En la primera etapa de la enfermedad, las manifestaciones son leves, lo que dificulta el diagnóstico precoz. Sin embargo, con el tiempo, la enfermedad progresa.

Poco a poco, el aparato ligamentoso también se involucra en el proceso. Se desarrollan complicaciones con un poco menos de frecuencia, que se manifiestan en forma de atrofia del tejido muscular y se acompañan de una disminución de la sensibilidad y trastornos funcionales de los órganos internos.

En casos avanzados, con osteocondrosis torácica, el cartílago y los huesos comienzan a romperse. Al mismo tiempo, se observa un envejecimiento prematuro del sistema musculoesquelético.

En el contexto de esta enfermedad, enfermedades como:

  • prostatitis;
  • neumoesclerosis;
  • atrofia de los órganos del sistema reproductivo, que a menudo conduce a la infertilidad;
  • aterosclerosis;
  • tumores cancerosos.

Según las estadísticas médicas, la osteocondrosis torácica de la columna ocurre por igual en hombres y mujeres.

Síntomas de la enfermedad

La osteocondrosis de la columna torácica tiene una serie de características específicas, que incluyen:

  • dolor en el pecho que ocurre cuando el cuerpo es grueso y durante mucho tiempo en una posición;
  • síndrome de dolor con aumento del esfuerzo físico, por ejemplo, al levantar pesas;
  • la aparición de dificultad para inhalar y exhalar, acompañada de una sensación de opresión en la parte central de la espalda;
  • dolor de dolor constante en los omóplatos;
  • entumecimiento de algunas partes del cuerpo;
  • sensación de frío prolongado que se presenta periódicamente, acompañado de escalofríos;
  • disminución de la temperatura corporal en las piernas;
  • Prurito y ardor en los miembros inferiores.

Con funciones deterioradas del sistema vascular de la columna torácica, los pacientes tienen una serie de signos característicos:

  • descamación de la piel;
  • uñas finas y quebradizas;
  • dolor abdominal, flatulencia;
  • trastornos de las heces, en los que los episodios de diarrea pueden ser reemplazados por estreñimiento;
  • náuseas, acidez estomacal;
  • síntomas de neuralgia intercostal;
  • disminución de la actividad sexual.

Con la osteocondrosis torácica, hay dos tipos de síndrome de dolor:

  1. Dolor de espalda (dolor de espalda).
  2. Dorsago (atrás).

El primero se caracteriza por un dolor prolongado en las áreas dañadas de las vértebras y los discos intervertebrales. El segundo es un dolor paroxístico intenso de carácter agudo, acompañado de una sensación de rigidez muscular y dificultad para respirar.

Una de las complicaciones que acompañan a la osteocondrosis de la columna torácica es la gastritis, o más bien sus exacerbaciones, caracterizadas por dolor en la región epigástrica.

Causas de la osteocondrosis

El desarrollo de la osteocondrosis de la columna torácica se debe a cambios patológicos que ocurren en los discos intervertebrales. Las causas de esta enfermedad pueden ser:

  • predisposición hereditaria;
  • hernia, deformidad del disco;
  • formación de osteofitos;
  • destrucción del cartílago;
  • suministro insuficiente de sangre al canal espinal, que se ha desarrollado debido a la obstrucción de los vasos y arterias de conducción;
  • degeneración de huesos, cartílagos y tejido muscular causada por una carga mal distribuida en la columna;
  • trastornos metabólicos causados por la deficiencia de calcio en el cuerpo.

Los factores que actúan como causa de los cambios patológicos son:

  • levantar objetos pesados;
  • trabajo sedentario;
  • larga estancia en una posición;
  • carga desigual en la columna vertebral;
  • lesión espinal;
  • escoliosis.

La osteocondrosis torácica a menudo se diagnostica en profesionales involucrados en deportes de fuerza.

Diagnósticos

La osteocondrosis torácica requiere diagnóstico obligatorio y diferenciación con otras enfermedades que tienen síntomas similares. A través de un examen en profundidad, se excluyen:

  • angina de pecho;
  • ataque al corazón;
  • inflamación pulmonar;
  • patología con síntomas gástricos.

De esta manera, se puede evitar un diagnóstico erróneo. La evaluación del estado del paciente se realiza sobre la base de la anamnesis, teniendo en cuenta todos los síntomas de la enfermedad y las quejas del paciente.

Para confirmar el diagnóstico, aclarar la ubicación de las áreas afectadas, identificar neoplasias benignas y tumores cancerosos, se utilizan métodos instrumentales progresivos:

  • radiografía;
  • CT;
  • resonancia magnetica.

Para determinar el grado del proceso inflamatorio en la osteocondrosis, se prescriben análisis de sangre y orina.

Tratamiento

El régimen de tratamiento para la osteocondrosis torácica se desarrolla individualmente. La condrosis se refiere a aquellas enfermedades que pueden provocar la interrupción de los órganos internos, por lo que debe tratarse.

En este caso se necesita un enfoque integrado. La terapia médica es obligatoria.

Tratamiento conservador

A los pacientes se les recetan analgésicos y medicamentos con un espectro de acción antiinflamatorio. Con la ayuda de estos medicamentos, que alivian el dolor y reducen la inflamación, se asegura la movilidad de las vértebras en la región torácica. Las manifestaciones agudas se detienen rápidamente mediante inyección.

Paralelamente, para mejorar el estado de los huesos y cartílagos, se prescriben condroprotectores, minerales y complejos vitamínicos.

La eliminación de los espasmos musculares es proporcionada por relajantes musculares.

Para acelerar el efecto, puede usar ungüentos y cremas terapéuticas para uso externo.

Los pacientes se someten a bloqueos paravertebrales, con la ayuda de los cuales es posible reducir el dolor. Las soluciones inyectables contienen corticoides y antisépticos.

Es imposible curar la osteocondrosis torácica solo con medicamentos. Estamos hablando de medidas como la corrección del estilo de vida, una nutrición adecuada, masajes, fisioterapia y otros métodos. Es bastante posible acelerar el proceso de recuperación si se incluyen procedimientos fisioterapéuticos en el régimen de tratamiento: magnetoterapia, láser, terapia de vacío, método de tracción, etc.

En caso de ineficacia del tratamiento farmacológico, a los pacientes se les puede prescribir cirugía. A veces la cirugía es la única opción. Las indicaciones absolutas para la cirugía son la inestabilidad espinal, la estenosis del canal o la hernia espinal.

Organización de una nutrición adecuada.

Con osteocondrosis, se proporciona una dieta sin sal. Además, es necesario excluir los alimentos picantes, grasos, fritos, las carnes ahumadas, el alcohol, las bebidas carbonatadas, el café; limitar el uso de azúcar, especias y mayonesa.

Por lo demás, la dieta debe ser lo más equilibrada posible y contener todas las vitaminas y minerales destinados a mejorar el funcionamiento del sistema musculoesquelético.

El menú diario debe incluir alimentos ricos en calcio y fósforo. Esta lista incluye requesón, quesos duros, leche, pescado de mar magro y carne. Verduras, frutas y cualquier verdura también serán útiles.

terapia física

El complejo de ejercicios de fisioterapia contiene ejercicios especiales destinados a aumentar la movilidad del área problemática de la columna vertebral, eliminar el estrés innecesario en algunos elementos del sistema esquelético y eliminar los espasmos musculares en la región cervicotorácica.

Para realizar los ejercicios, necesitarás un palo de gimnasia y una colchoneta. La ropa debe ser lo más cómoda posible y no restringir el movimiento.

Antes de comenzar las clases, para calentar los músculos, se recomienda hacer un calentamiento: lento y alternado, balanceando piernas y brazos y girando el torso, la pelvis y la cabeza en diferentes direcciones. Si el movimiento del cuerpo causa dolor, debe hacerse más suavemente o detenerse.

Ejemplos de ejercicios para la osteocondrosis torácica:

  1. Posición inicial: acostado boca abajo, con las manos detrás de la cabeza. Primero debe abrir los codos lo más posible, luego levante los hombros y el cuerpo. Mantén esta posición durante tres segundos. Haz el ejercicio 5 veces seguidas.
  2. Posición inicial: similar. Pon tus manos detrás de tu espalda, dobla tus palmas en la cerradura. Inclínate, tratando de levantar los brazos. Mantenga durante tres segundos. Realizar al menos 5 veces.
  3. Posición: de pie en el suelo, con los pies separados al ancho de los hombros. Pon tus manos sobre tus hombros: de izquierda a izquierda, de derecha a derecha. Levante los hombros por turnos, dirigiendo la cabeza en la dirección del movimiento. Corre 10 veces.
  4. Acuéstese boca abajo, estire los brazos hacia adelante. Levanta tu cuerpo. Realizar 5 veces seguidas. Luego ponga sus manos a lo largo del cuerpo y levante el cuerpo también.
  5. Siéntate en una silla, sosteniendo un palo de gimnasia frente a ti. Tome una respiración profunda mientras endereza su cuerpo. Al exhalar, las manos con la bala se arrodillan, el torso se inclina hacia adelante. Corre varias veces.
  6. De pie en el suelo, pon tus manos con un palo de gimnasia sobre tus hombros. Gira tu cuerpo hacia la derecha, luego hacia la izquierda 10 veces.
  7. Siéntate en una silla, recuéstate. Doble fuertemente, usando la región torácica. Realiza al menos 10 movimientos.

Este ejercicio se puede hacer en casa. Pero primero, es muy recomendable que obtenga el permiso de un especialista.

Métodos de la medicina tradicional.

Los remedios caseros ayudarán a hacer frente más rápido a las manifestaciones de la osteocondrosis torácica.Los medicamentos basados en ingredientes activos naturales se utilizan con éxito como terapia adyuvante. Algunas recetas efectivas:

  • Frotar para uso externo. Se prepara de la siguiente manera: en partes iguales, debe tomar raíz de diente de león, hojas de menta, brotes de abedul, cilantro. Picar los ingredientes y mezclar. Entonces 3 cucharadas. lmezcle (con un portaobjetos), vierta medio vaso de agua hirviendo y ponga a fuego lento durante 5 minutos. Enfriar, añadir 75 g de mantequilla y 75 g de aceite de girasol. Cocine por otros 15 minutos. Frote las áreas problemáticas, luego vístase o envuélvase inmediatamente.
  • Artilugio. Para su preparación, puede usar jugo de rábano picante fresco, ajenjo de hierbas amargas al vapor o semillas de lino.
  • Analgésico. Preparado así: 2 cdas. lEl color de manzanilla se debe verter con 350 ml de agua hirviendo y poner a fuego lento durante 5 minutos. Luego enfriar, colar. Tomar 125 ml 3 veces al día después de las comidas.
  • Frote el lúpulo. Para cocinar en partes iguales, tome: conos de lúpulo, molidos en polvo y manteca de cerdo derretida. Los ingredientes se mezclan. Se utiliza como un masaje para aliviar la tensión muscular.

Todos estos medicamentos se preparan en casa, pero puede usarlos para tratar la enfermedad solo después de consultar a un especialista.